Video: Sistema reproductor femenino

Probablemente ya has oído u oirás la pregunta : "¿De dónde vienen los bebés?". Para algunas personas puede resultar embarazoso hablar de este tema, incluso durante la universidad, pero considerando que todos tenemos genitales y, dado que más del 50 por ciento de la población tiene genitales femeninos, este es definitivamente un tema importante. No temas. Soy Marcell de Kenhub, y hoy aprenderemos todo lo que necesitas saber sobre el aparato reproductor femenino.

Antes de comenzar, como siempre te daré una visión general de lo que aprenderemos hoy. En este videotutorial hablaremos de los órganos genitales femeninos y de cómo se clasifican. A medida que avancemos, echaremos un vistazo a las funciones de cada órgano, así como a las funciones generales del sistema reproductor femenino.

El aparato reproductor femenino está formado por los órganos genitales internos y los órganos genitales externos. Los genitales internos están formados por los ovarios, las tubas uterinas, el útero y la vagina. Los genitales externos están compuestos por el vestíbulo de la vagina, los labios menores, el clítoris, los labios mayores y el monte del pubis.

En general, el aparato reproductor femenino tiene varias funciones. Entre ellas, la formación y el desarrollo de los gametos femeninos, también conocidos como óvulos; la producción de las hormonas sexuales femeninas, estrógeno y progesterona; el placer sexual y la reproducción. También la fecundación del óvulo, así como la implantación y maduración del embrión y del feto, tienen lugar en el aparato reproductor femenino. Es nuestro primer hogar.

Comencemos por los órganos genitales internos.

Los ovarios son las gónadas del aparato reproductor femenino, lo que significa que son glándulas que producen células reproductoras o gametos. Estos órganos multifuncionales están situados bilateralmente en la cavidad pélvica. En esta imagen podemos ver los órganos pélvicos in situ desde una perspectiva anterior. Los ovarios se localizan posterior e inferiormente a las tubas uterinas. En esta imagen, también podemos ver el recto detrás del útero, la vagina y los huesos de la pelvis.

Ahora que nos hemos orientado, podemos pasar a una vista posterior y entender esta ilustración del aparato reproductor femenino.

Los ovarios están resaltados en verde. Como hemos mencionado antes, los ovarios producen y liberan óvulos. Los ovarios también son glándulas endocrinas que producen estrógeno y progesterona, hormonas sexuales femeninas cruciales para la fertilidad, la regulación del ciclo menstrual y la maduración sexual de la mujer.

Cada ovario está suspendido en la cavidad peritoneal por el ligamento suspensorio del ovario y el ligamento propio del ovario.

Las tubas uterinas, también conocidas como trompas de Falopio u oviductos, se relacionan estrechamente con la cara anterosuperior de los ovarios. Estos tubos musculares son estructuras reproductivas fundamentales, ya que se encargan de transportar los óvulos desde los ovarios hasta el útero. También son el lugar de fecundación de estas células.

Cada una de las tubas uterinas consta de cuatro partes que analizaremos a continuación. En primer lugar, está el infundíbulo, que es el extremo distal de la trompa uterina, es decir, el más cercano al ovario. Se abre en la cavidad peritoneal. El infundíbulo contiene proyecciones mucosas en forma de dedos, llamadas fimbrias, que se extienden sobre la cara superior de los ovarios. Cuando se libera un óvulo del ovario, las fimbrias lo transportan a la trompa uterina.

Siguiendo el camino de un óvulo, llegamos a la ampolla, la parte más ancha y larga de la trompa y es el lugar más común de la fecundación. Medial a la ampolla se encuentra el istmo, que es la parte más estrecha y muscular de la trompa uterina. El istmo se continúa hacia proximal con la porción intramural o uterina de las tubas uterinas y esta se comunica directamente con la cavidad uterina.

Hablemos ahora del útero. Este órgano hueco se ubica en la profundidad de la cavidad pélvica y es el sitio de desarrollo del embrión y el feto. La pared uterina se compone de varias capas: la más interna es el endometrio, que se desprende durante la menstruación y es el lugar habitual de implantación del óvulo fecundado o blastocisto. El miometrio, compuesto por músculo liso, es capaz de contraerse durante el parto y la menstruación, y la capa más externa es el perimetrio.

El útero se puede dividir en cuatro partes que vamos a revisar ahora. Esta parte superior redondeada se denomina fondo uterino. El cuerpo es la parte principal del útero y contiene un lumen triangular llamado cavidad uterina. Las dos tubas uterinas se comunican con esta cavidad. Inferiormente se encuentra el istmo, que es una parte estrecha y constreñida del útero. Por último, en la parte inferior del istmo se encuentra la parte más inferior del útero: el cuello uterino. El cuello uterino conecta el útero y la vagina y se compone de dos partes: supravaginal, que se encuentra por encima del nivel de la vagina, y vaginal, que se proyecta hacia el interior de la vagina.

El conducto del cuello uterino tiene dos orificios o aberturas: el orificio interno, que se abre hacia el istmo del útero, y el orificio externo, que se abre hacia la vagina. Ten en cuenta que aquí hablamos del orificio interno anatómico. Te menciono esto porque existe también un orificio interno histológico, que se define como el punto, un poco más caudal que el anterior, en el cual la mucosa ya no experimenta cambios durante el ciclo ovárico. En esta vista lateral de la cavidad pélvica, se puede ver que el útero es posterosuperior a la vejiga urinaria y anterior al recto. Un útero en posición anatómica tiene dos componentes importantes: anteflexión y anteversión. Anteflexión se refiere a que el cuerpo del útero está inclinado hacia delante en comparación con el eje mayor del cuello uterino, mientras que anteversión significa que el eje largo del cuello uterino está inclinado hacia delante en comparación con el eje mayor de la vagina.

El cuerpo y el fondo del útero están cubiertos por el peritoneo visceral, una membrana que recubre los órganos abdominales y pélvicos y que se repliega sobre sí mismo a nivel de la vejiga y el recto, formando los sacos vesicouterino, por delante del útero, y el saco rectouterino, detrás de él.

Ahora revisemos el órgano interno más superficial: la vagina. La vagina es un tubo fibromuscular inferior al cuello del útero, rodeado de tejido conectivo pélvico, que permite que la vagina se expanda para hacer posible el parto.

La vagina tiene varias funciones. Contribuye al placer sexual durante el coito vaginal. Ayuda a la fecundación de los óvulos permitiendo el depósito y la transmisión del semen al útero. Permite la expulsión de los productos de la menstruación. Es un lugar de paso para los productos de la concepción cuando el embarazo no es viable y para el feto durante el parto. En lo que respecta a la retención del semen, los fondos de saco vaginales, más conocidos como fórnices vistos aquí, son importantes en la retención del semen eyaculado.

Terminemos con los órganos reproductores femeninos internos con una breve explicación de lo que sucede en los ovarios y su papel en el ciclo menstrual.

Dentro de cada ovario hay miles de grupos de células llamadas folículos ováricos, cada uno de los cuales contiene un óvulo inmaduro llamado ovocito. Los folículos maduran durante el ciclo menstrual y en esta imagen se destaca en verde el folículo maduro, que se llama folículo terciario, que libera su ovocito en el momento de la ovulación.

Tras la ovulación, las fimbrias de la trompa uterina atrapan al ovocito y lo llevan hacia la trompa. Luego es impulsado a través de la trompa mediante contracciones peristálticas. La trompa uterina es el lugar donde se produce la fecundación. En un embarazo normal, si el ovocito es fecundado por un espermatozoide masculino, pasará por las fases iniciales de desarrollo y viajará hasta el útero en tres o cuatro días antes de implantarse en la pared uterina un par de días después.

Tras liberar el ovocito, el folículo terciario se transforma en un cuerpo lúteo. En caso de fecundación, el cuerpo lúteo se mantendrá en el ovario y secretará estrógenos y progesterona para favorecer la implantación del embrión en la pared uterina. Sin embargo, si no se produce la fecundación, el folículo ovárico forma brevemente el cuerpo lúteo antes de encogerse y transformarse en el cuerpo albicans o cuerpo blanco, que es una pequeña cantidad de tejido cicatricial fibroso.

Con eso cerramos los órganos genitales internos. Ahora vamos a centrar nuestra atención en los órganos genitales externos.

Es importante considerar que los órganos genitales externos femeninos pueden tener múltiples formas, colores y tamaños. Los diagramas mostrados en los textos y atlas de anatomía son a menudo representativos de una fracción de la realidad. Recuerda que en anatomía y en especial en cuanto a la variabilidad del cuerpo, es muy fácil hacer mal uso del término “normal”. Puedes consultar la página web Labia Library para saber más sobre la gran cantidad de variantes anatómicas en los genitales femeninos. Ten en cuenta que está en inglés, pero probablemente puedes traducirla con tu navegador.

La primera estructura de la que debemos hablar es la vulva. Es importante entender que el término vulva se utiliza para referirse a todos los genitales femeninos externos, los cuales podemos ver en esta imagen. La vulva se encuentra en la parte anterior del periné. Como se ha mencionado anteriormente, revisaremos los principales componentes de la vulva, empezando por el vestíbulo de la vagina. Luego hablaremos de los labios menores, el clítoris, los labios mayores y finalmente el monte del pubis.

El vestíbulo de la vagina, o simplemente vestíbulo, es una zona que se encuentra en la entrada del canal vaginal. Eso es exactamente lo que se representa en este corte coronal de la pelvis femenina donde podemos ver el vestíbulo y el canal vaginal. Cambiando a esta perspectiva inferior del periné femenino, podemos ver que el vestíbulo está situado entre los labios menores lateral y posterolateralmente y está limitado anteriormente por el margen posterior del prepucio del clítoris. En la parte posterior del vestíbulo hay una depresión llamada fosa del vestíbulo de la vagina o simplemente fosa vestibular.

El vestíbulo contiene el orificio o abertura vaginal, las aberturas de las glándulas vestibulares mayores y menores, y el orificio externo de la uretra, que es el lugar por donde sale la orina. El himen, no representado en esta imagen, también forma parte de la vulva en algunas personas. Se adhiere al orificio vaginal y lo cubre parcialmente. El himen semilunar o falciforme, que se muestra aquí, es la forma más común. Sin embargo, al igual que con el resto de los genitales externos, existen múltiples variaciones, incluso su ausencia congénita.

Revisemos ahora las glándulas vestibulares mayores. Estas glándulas también se conocen como glándulas de Bartolino o Bartholin y aquí podemos ver las aberturas de los conductos de estas glándulas. Estas dos glándulas, del tamaño de un guisante, están situadas en la abertura de la vagina y son homólogas a las glándulas bulbouretrales del sexo masculino. Su función es secretar una sustancia mucosa que lubrica la vulva.

Los labios menores son dos pliegues longitudinales delgados carentes de pelos que rodean el vestíbulo y su contenido. Se encuentran entre los labios mayores y están delimitados por la hendidura vulvar. Los labios menores se unen hacia posterior en el frenillo de los labios menores. Anteriormente, cada uno de los labios menores se bifurca en una capa superior y otra inferior. La capa superior de cada lado se une con la del lado opuesto dando origen a un pliegue que cubre el glande del clítoris y que se conoce como prepucio del clítoris. La capa inferior de cada lado pasa por debajo del glande para formar el frenillo del clítoris.

El clítoris es un órgano eréctil responsable de gran parte de las sensaciones sexuales del sexo femenino. Es bastante complejo, análogo al pene masculino pero sin la función urinaria y a menudo se simplifica demasiado en los libros o atlas anatómicos. El clítoris está situado donde los labios menores se unen anteriormente y está compuesto por el glande, el cuerpo y los dos pilares. El glande es visible aquí, mientras que el cuerpo y los pilares se encuentran debajo de la superficie.

La extensión completa del clítoris se representa en esta imagen que utilizaremos para explicar esta estructura. Cada uno de los dos pilares del clítoris están unidos a lo largo de cada rama inferior del pubis. Los pilares se unen anteriormente para formar el cuerpo del clítoris. El cuerpo asciende hacia la sínfisis del pubis y desciende para convertirse en el glande. El cuerpo del clítoris, que podemos ver aquí en sección transversal, está formado por dos cuerpos cavernosos cilíndricos, un tejido eréctil que también está presente en los pilares del clítoris.

El glande del clítoris está compuesto por otro tipo de tejido eréctil, que también está presente en los bulbos del vestíbulo, un par de estructuras eréctiles situadas a cada lado de la abertura vaginal. En nuestra imagen de corte transversal, también podemos ver la inervación y vascularización del clítoris. El clítoris está densamente inervado, lo cual lo hace muy sensible a la estimulación táctil y/o sexual.

El glande es la parte más inervada del clítoris. La mayor parte de la inervación de este órgano llega a través del nervio dorsal del clítoris. Desde el punto de vista clínico, es fundamental reconocer y comprender la anatomía del clítoris para evitar daños involuntarios en estas estructuras durante los procedimientos quirúrgicos.

Los labios mayores son la parte más lateral de la vulva y están ubicados alrededor de los labios menores. Los labios mayores son gruesos pliegues longitudinales de piel y tejido adiposo situados detrás del monte del pubis y delante del cuerpo perineal. Permanecen lampiños hasta la pubertad y forman los límites laterales de la hendidura vulvar. Los dos labios mayores se unen anteriormente en la comisura anterior.

La última estructura de la que queremos hablar es el monte del pubis. Esta eminencia redondeada, situada delante de la sínfisis púbica está formada por una gran cantidad de tejido adiposo subcutáneo y es la que más vello púbico presenta después de la pubertad.

Ahora que hemos hablado de la anatomía macroscópica del aparato reproductor femenino, veamos un escenario muy frecuente en nuestra sección de correlaciones clínicas.

Un embarazo ectópico se produce cuando un óvulo fecundado se implanta y crece en un lugar fuera del cuerpo del útero. Esto ocurre con mayor frecuencia en la trompa uterina, en cuyo caso se conoce como embarazo tubárico, pero un embarazo ectópico también puede ocurrir en el ovario, el cuello uterino o la cavidad peritoneal, lo que se muestra mejor en esta perspectiva lateral de la pelvis. Este tipo de embarazo no es viable, ya que el óvulo fecundado no puede sobrevivir y el tejido en crecimiento puede generar una hemorragia potencialmente mortal para la madre si no se diagnostica o no se trata.

Muy bien, con esto terminamos nuestro tutorial sobre el aparato reproductor femenino. Antes de dejarte ir, hagamos un breve resumen de lo que hemos aprendido hoy.

Comenzamos nuestro tutorial hablando de los órganos genitales internos. En primer lugar, los ovarios. Hemos señalado que los ovarios son las gónadas femeninas y producen óvulos junto con las hormonas sexuales femeninas. Luego hablamos de las tubas uterinas, también conocidas como trompas de Falopio, que transportan los óvulos desde los ovarios hasta el útero.

Las tubas uterinas pueden dividirse en cuatro partes: el infundíbulo es el extremo distal que da lugar a las fimbrias, la ampolla es la porción más ancha, el istmo es la porción más estrecha y, por último, la porción intramural se encuentra dentro del miometrio.

También observamos el útero, que está formado por el fondo, el cuerpo, el istmo y el cuello uterino. Parte del cuello uterino se proyecta hacia la vagina. Repasamos la vagina, que es un órgano de placer, recibe el pene durante las relaciones sexuales, forma parte del canal del parto y da paso a los productos de la menstruación.

En cuanto a los órganos genitales externos, también conocidos como la vulva, estudiamos el vestíbulo de la vagina, los labios menores que delimitan el vestíbulo, el clítoris que es el único órgano exclusivamente dedicado al placer sexual, los labios mayores que son un par de pliegues gruesos de piel y, por último, hemos visto el monte del pubis que es una prominencia redondeada de tejido adiposo subcutáneo delante de la sínfisis púbica.

Para concluir este tutorial, hemos revisado el embarazo ectópico.

Y eso es todo. Excelente trabajo. Muchas gracias por acompañarme y ¡feliz estudio!