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Histología del sistema digestivo

Video recomendado: Sistema digestivo [30:54]
Principales órganos del aparato digestivo.

El sistema o aparato digestivo es la vía mediante la cual los alimentos ingresan al cuerpo y los desechos sólidos son expulsados. Es un aparato muscular de forma tubular que comienza en la cavidad bucal, viaja a través de las cavidades torácica y abdominal, y termina a nivel del ano en la cavidad pélvica.

El sistema digestivo y sus partes pueden dividirse estructuralmente en porciones superior e inferior. El tracto digestivo superior se extiende desde la cavidad bucal hasta el músculo suspensor del duodeno en la flexura duodenoyeyunal. El tracto digestivo inferior continúa desde este punto distalmente hasta el ano. Además, hay órganos que asisten en el proceso de digestión, pero están situados fuera del tracto digestivo. Estos órganos, que incluyen las glándulas salivales, páncreas, vesícula biliar e hígado, forman el sistema digestivo accesorio.

Este artículo brinda una visión general de la histología de los órganos del sistema digestivo.

Puntos clave sobre la histología del sistema digestivo
Lengua y epiglotis Lengua: cara dorsal, epitelio escamoso queratinizado; cara ventral, epitelio escamoso no queratinizado
Epiglotis:
cara lingual, epitelio escamoso estratificado no queratinizado; cara laríngea, epitelio ciliado respiratorio
Encía y dientes Dientes: tres tejidos especializados; esmalte, dentina, cemento
Encía:
epitelio oral, surcular, de unión
Glándulas salivales Presentan células serosas (producen amilasa) y mucosas (secreción viscosa y mucosa)
Glándula parótida:
puramente serosa
Glándula sublingual:
seromucosa mixta, con predominio de células mucosas
Glándula submandibular
: seromucosa mixta, mayor proporción de células serosas
Esófago Mucosa interna: varias capas de epitelio escamoso no queratinizado
Lámina propia:
contiene fibras de colágeno, numerosos vasos sanguíneos y vasos linfáticos
Lamina muscular mucosa:
fibras musculares lisas
Submucosa:
glándulas submucosas
Capa muscular:
tercio superior presenta músculo esquelético, el tercio inferior músculos lisos (longitudinal externo y circular interno), y ambas formas en el tercio medio
Adventicia externa:
tejido conectivo
Estómago Mucosa gástrica: revestida por una capa de epitelio cilíndrico secretor de moco (epitelio foveolar)
Submucosa
: contiene vasos sanguíneos, vasos linfáticos y plexos nerviosos
Capa muscular:
consta de tres capas de músculo liso
Serosa externa
Páncreas Rodeado por una cápsula delgada de tejido conectivo. Dividido en muchos lobulillos, alrededor del 80-90% es exocrino (componente exocrino) y está formado por células acinares
El componente endocrino está formado por los islotes pancreáticos (de Langerhans). Estas zonas más claras de los islotes contienen células B, A, D y PP para la somatostatina y el polipéptido pancreático
Intestino delgado Mucosa: revestida por una capa de epitelio cilíndrico caracterizado por enterocitos, células caliciformes y células enteroendocrinas
Lámina propia:
con muchos ganglios linfáticos y la muscular de la mucosa
Submucosa:
contiene glándulas, vasos sanguíneos y linfáticos, y el plexo submucoso (de Meissner)
Capa muscular:
formada por una capa muscular circular interna y una capa muscular longitudinal externa, entre las que se encuentra el plexo mientérico (de Auerbach)
Serosa externa
Intestino grueso Mucosa: formada por epitelio cilíndrico de una sola capa con microvellosidades cortas y muchas células caliciformes
Lámina propia y lámina muscular mucosa

Submucosa
alberga vasos sanguíneos, nervios y el plexo submucoso (de Meissner)
Capa muscular
músculos longitudinales externos que se extienden en tres bandas características, las tenias del colon
Serosa
Hígado Formado por unidades funcionales denominadas lobulillos hepáticos, que tienen una vena central y están delimitados por prolongaciones de la cápsula fibrosa del hígado (septos interlobulares)
La unión de varios lobulillos forma una zona portal, que contiene tejido conectivo, nervios y vasos linfáticos, así como una tríada portal, formada por una rama de la vena porta hepática y la arteria hepática, así como un conducto biliar interlobulillar
Parénquima:
hepatocitos
Sinusoides hepáticos

Macrófagos estrellados
o células de Kupffer
Vesícula biliar Pared: formada por una mucosa, una capa muscular y una serosa
Mucosa:
formada por una capa de epitelio cilíndrico simple (con borde en cepillo)
Lámina propia de la mucosa:
compuesta por tejido conectivo laxo
Capa muscular:
una capa de músculo liso orientado aleatoriamente
Rodeada por una serosa, excepto en la zona en la que la vesícula se une al hígado, donde la serosa está sustituida por una adventicia
Apéndice vermiforme Revestido por un epitelio cilíndrico de una sola capa que presenta criptas intestinales profundas pero no vellosidades
Lámina propia y submucosa:
tejido linfático prominente
Capa muscular
circular interna y longitudinal externa
Rodeado por una serosa

Lengua y epiglotis

La lengua es un órgano muscular formado por músculos tanto intrínsecos como extrínsecos. La lengua contiene epitelio escamoso queratinizado en su cara dorsal, específicamente en las papilas fungiformes/filiformes. En su cara ventral está recubierta en gran parte por una capa múltiple de epitelio escamoso no queratinizado y se caracteriza por numerosas papilas tanto en la superficie dorsal como ventral que albergan a las papilas gustativas para facilitar el sentido del gusto, así como la detección sensitiva de tacto y temperatura.

La epiglotis se localiza en la entrada de la laringe y está compuesta por cartílago elástico. Esta cierra el aditus laríngeo durante la deglución para prevenir el paso de alimentos y líquidos hacia los pulmones por medio de la tráquea.

Las caras linguales o superiores de la epiglotis apuntan hacia la lengua, mientras que la cara laríngea mira hacia la laringe. Ambos lados tienen un recubrimiento epitelial diferente. La cara lingual está cubierta por un grueso epitelio escamoso estratificado no queratinizado, mientras que la cara laríngea está cubierta por epitelio respiratorio ciliado. Existen muchas glándulas seromucosas presentes en la lámina propia de la mucosa que mantienen el epitelio humectado.

Fortalece tu conocimiento acerca de la histología de la lengua y la epiglotis con esta unidad de estudio:

¿Te gustaría poner a prueba tu nuevo conocimiento? Responde el siguiente cuestionario:

Encía y dientes

Los dientes son un componente principal de la cavidad bucal y son esenciales para dar inicio al proceso de digestión.

Los dientes están formados por tres tejidos especializados:

  • Esmalte: es una capa dura, delgada y traslúcida de tejido mineralizado acelular que cubre la corona del diente.
  • Dentina: es el tejido dental más abundante, y se encuentra profundo al esmalte en la corona y al cemento en la raíz del diente.
  • Cemento: es una capa delgada y de color amarillo pálido de tejido mineralizado que cubre la dentina en la raíz del diente.

Las encías se localizan dentro de la cavidad bucal y comprenden la porción que rodea a los dientes. Constan de tejido mucoso que cubre los procesos alveolares del maxilar y la mandíbula, y terminan en el cuello de cada diente.

Hay dos tipos de encías: la encía libre o marginal, que es móvil y rodea el cuello del diente; y la encía adherida, que se encuentra entre la encía libre y los procesos alveolares del maxilar y la mandíbula.

El epitelio de la encía rodea la cara externa de la encía, incluyendo las áreas tanto móviles como adheridas, así como el surco gingival y el epitelio de unión. Se divide en las siguientes porciones principales:

  • Epitelio oral.
  • Epitelio sulcular.
  • Epitelio de unión.

¿Quieres aprender más de la histología de los dientes y la encía? Entonces no olvides navegar por la siguiente unidad de estudio:

Pon a prueba tu conocimiento sobre la encía y los dientes con el cuestionario a continuación:

Glándulas salivales

Las glándulas salivales son glándulas exocrinas responsables de la producción y secreción de saliva. Hay tres pares grandes de glándulas salivales: la glándula parótida, la glándula sublingual y la glándula submandibular.

Las glándulas salivales están compuestas por dos tipos principales de células: las células serosas y las células mucosas. Las células serosas producen una secreción acuosa rica en enzimas como la amilasa, mientras que las células mucosas producen una secreción viscosa y mucosa. Las células secretoras se organizan en unidades secretoras (acinos), que son pequeñas estructuras similares a glándulas que drenan en los conductos intralobulillares ramificados, así como en los conductos extralobulillares.

La glándula parótida es puramente serosa con conductos estriados e intercalares distintivos. La glándula sublingual es una glándula seromucosa mixta, con una predominancia de células mucosas. La glándula submandibular es un glándula seromucosa mixta, pero con una proporción más alta de células serosas.

Conoce más acerca de la histología de estas tres grandes glándulas salivales explorando la unidad de estudio a continuación:

Evalúa lo que has aprendido sobre las características histológicas de la glándula parótida, la glándula salival más grande en el cuerpo humano, con el siguiente cuestionario:

Esófago

El esófago es un órgano muscular hueco del aparato digestivo que conecta la orofaringe y el estómago. El esófago tiene una estructura histológica típica del sistema digestivo.

La mucosa interna consta de múltiples capas de epitelio escamoso no queratinizado. Esta capa epitelial especial protege al esófago del desgaste mecánico y desgarros causados por el bolo alimenticio durante la deglución. La lámina propia contiene fibras de colágeno, numerosos vasos sanguíneos y vasos linfáticos. También, se encuentran fibras de músculo liso de la lámina muscular de la mucosa, que forman pliegues longitudinales en la mucosa y hacen que el lumen tenga forma de estrella.

La siguiente capa submucosa contiene glándulas submucosas, las cuales forman el moco para la capa epitelial. La capa muscular del esófago se divide en tres porciones. El tercio superior está formado por músculo esquelético, el tercio inferior sólo por músculos lisos (longitudinal externo y circular interno), y se puede encontrar tanto músculo esquelético como liso en el tercio medio. La adventicia externa consiste en tejido conectivo y su función es conectar el esófago con las estructuras circundantes.

¿Te gustaría conocer con más detalle la histología distintiva del esófago? No olvides revisar más de este tema con nuestra unidad de estudio:

Evalúa tus conocimientos sobre la histología del esófago con este cuestionario:

Estómago

El estómago es un órgano hueco que se ubica entre el esófago y el duodeno y se utiliza para almacenar y procesar el contenido gástrico (quimo). Macroscópicamente, las partes del estómago son el cardias, cuerpo gástrico, fundus gástrico y porción pilórica. Estas diferencias se observan en las fosas gástricas y sus glándulas gástricas asociadas. El estómago tiene la misma organización estructural a lo largo de todas sus porciones, y consiste en una mucosa, submucosa, capa muscular y serosa.

La mucosa gástrica está recubierta por una sola capa de epitelio cilíndrico secretor de moco (epitelio foveolar), que forma una barrera protectora contra los jugos gástricos ácidos.
Mientras que las glándulas del cardias secretan mayormente mucinas, las glándulas del cuerpo y fundus gástrico contienen varias células exocrinas.

Las glándulas gástricas se localizan cercanas entre sí en la lámina propia, y se extienden hacia la lámina muscular de la mucosa. La submucosa contiene vasos sanguíneos y linfáticos, así como plexos nerviosos que aseguran la neurovascularización y control del estómago. La capa muscular del estómago consta de tres capas de músculo liso que son responsables de la digestión mecánica y la mezcla de los alimentos. La serosa externa ancla el estómago en la cavidad abdominal.

Consolida tu conocimiento acerca de la histología del estómago trabajando con la unidad de estudio a continuación:

¡Evalúa tu aprendizaje! Responde el siguiente cuestionario y descubre qué tanto sabes sobre este tema:

Páncreas

El páncreas es una glándula heterocrina que tiene funciones tanto exocrinas como endocrinas. Está formado por un cuerpo, una cabeza y una cola, y está rodeado por una cápsula delgada de tejido conectivo.

El tejido pancreático está dividido en muchos lobulillos. La mayor parte, alrededor del 80-90%, es exocrina (componente exocrino) y consta de células acinares. Estas células producen enzimas digestivas que se secretan en los túbulos acinares. Estos túbulos se abren en conductos intralobulares e interlobulares más grandes, los cuales finalmente desembocan en el conducto pancreático hacia al duodeno. La secreción, que contiene enzimas, contribuye a la digestión de grasas, proteínas y carbohidratos en el intestino delgado.

El componente endocrino del páncreas se encuentra principalmente en la cola del páncreas y está formado por los islotes pancreáticos (de Langerhans). Estas áreas que corresponden a los islotes contienen células B (células de la insulina) que producen insulina, células A (células del glucagón) que producen glucagón, y células D (células de la somatostatina) y PP (células del polipéptido pancreático) para la somatostatina y el polipéptido pancreático.

¿Quieres aprender más de la histología de los componentes exocrinos y endocrinos del páncreas? Entonces explora nuestra unidad de estudio:

No olvides poner tu conocimiento a prueba respondiendo este cuestionario y descubre cuánto sabes acerca de este tema:

Intestino delgado

El intestino delgado es un órgano del sistema digestivo y mide aproximadamente 6 metros de longitud. Es responsable de la absorción de nutrientes y está dividido en tres porciones: duodeno, yeyuno e íleon. Estas tres porciones del intestino delgado pueden distinguirse entre sí con la ayuda de ciertas características: pliegues circulares (de Kerckring), vellosidades intestinales, criptas y microvellosidades, todo lo cual aumenta significativamente la superficie de reabsorción y optimiza la absorción de nutrientes.

La pared del intestino delgado consta de la organización típica en capas del tracto digestivo.

La mucosa está recubierta por una sola capa de epitelio cilíndrico, caracterizada por enterocitos, células caliciformes y células enteroendocrinas. Profunda a la mucosa se encuentra la lámina propia, que contiene numerosos ganglios linfáticos así como la lámina muscular de la mucosa. La submucosa contiene glándulas, vasos sanguíneos y linfáticos, y el plexo submucoso (de Meissner). La capa muscular está conformada por una capa muscular circular interna y una capa muscular longitudinal externa, entre las cuales se localiza el plexo mientérico (de Auerbach). La serosa externa rodea al intestino delgado en el espacio peritoneal.

Las tres porciones del intestino delgado se pueden distinguir entre sí con la ayuda de algunas características.

  • El duodeno contiene glándulas submucosas duodenales (de Brunner) en la submucosa, las cuales secretan mucinas y bicarbonato.
  • En el yeyuno, los pliegues circulares (de Kerckring) son más pronunciados.
  • Típicamente, en el íleon se encuentran abundantes conglomerados linfonodulares ileales (placas de Peyer), las cuales forman parte del tejido linfoide asociado al tubo digestivo (GALT por sus siglas en inglés: Gastrointestinal Associated Lymphoid Tissue) y son colecciones de ganglios linfáticos. Los pliegues circulares son menos pronunciados aquí y las vellosidades son más cortas en esta región.

Conoce más sobre este tema con la siguiente unidad de estudio:

Pon a prueba lo que has aprendido hasta ahora de las características histológicas del duodeno, la primera porción del intestino, con el cuestionario a continuación:

Intestino grueso (colon)

El intestino grueso (colon) es responsable de la absorción de agua y electrolitos, así como de la formación y eliminación de heces mediante la peristalsis. Puede dividirse en varias porciones: ciego, colon ascendente, colon transverso, colon descendente, colon sigmoideo y recto.

La capa más interna del colon, la mucosa, consta de una sola capa de epitelio cilíndrico con microvellosidades cortas y muchas células caliciformes que producen moco. En contraste con el intestino delgado, el intestino grueso carece de pliegues circulares (de Kerckring) y vellosidades, teniendo en su lugar criptas intestinales profundas. La lámina propia y la lámina muscular de la mucosa le dan sostén a esta estructura. La submucosa alberga los vasos sanguíneos, los nervios y el plexo submucoso (de Meissner). La capa muscular consta de dos capas musculares distintivas, con los músculos de la capa longitudinal externa recorriendo en tres bandas características, las tenias del colon. La serosa forma la capa más externa de la pared del colon. Adicionalmente las tenias del colon, los apéndices omentales y el haustra del colon son características del intestino grueso.

También hay numerosos ganglios linfáticos en el intestino grueso, los cuales son especialmente comunes en el área del apéndice vermiforme. Al final del tracto digestivo, en el canal anal, el epitelio del colon es reemplazado gradualmente por epitelio escamoso estratificado con glándulas sudoríparas ecrinas y apocrinas, así como pelo y glándulas sebáceas.

¿Quieres aprender sobre la histología de las diferentes partes del intestino grueso? Navega a través de la siguiente unidad de estudio:

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Hígado

El hígado es el órgano interno más grande del ser humano y juega un papel central en los procesos metabólicos y en la eliminación de toxinas de la sangre. Se encuentra cubierto por una cápsula fibrosa, también conocida como cápsula Glisson. Histológicamente, está formado por unidades funcionales que reciben el nombre de lobulillos hepáticos, los cuales tienen una vena central y están delimitados por prolongaciones de la cápsula fibrosa del hígado (tabiques interlobulillares). Cuando se unen varios lobulillos se forma un área portal, la cual contiene tejido conectivo, nervios y vasos linfáticos, así como una tríada portal, que consiste en una rama de la vena porta hepática y la arteria hepática, así como un conducto biliar interlobulillar. Es importante recalcar que el flujo de la bilis es contracorriente al flujo sanguíneo.

El parénquima del hígado está compuesto por células epiteliales especializadas llamadas hepatocitos. Estos almacenan glucógeno y sintetizan bilis y ácidos grasos, así como diversas proteínas. Los hepatocitos se organizan en placas con forma de barras conocidas como cordones hepáticos, entre los que se encuentran los sinusoides hepáticos y los canalículos biliares.

Los sinusoides hepáticos son capilares dilatados que contienen sangre mezclada que proviene de la vena porta y la arteria hepática. Los macrófagos estrellados, también conocidos como células de Kupffer, son macrófagos especializados que fagocitan partículas desconocidas y células muertas. Existe un espacio perisinusoidal (de Disse) alrededor de los sinusoides, el cual es importante para el intercambio de sustancias entre los hepatocitos y la sangre.

Refuerza tu conocimiento de la histología del hígado revisando nuestra unidad de estudio:

Evalúa tu aprendizaje sobre este tema respondiendo el siguiente cuestionario y descubre qué tanto conoces:

Vesícula biliar

La vesícula biliar es un órgano pequeño en forma de pera que se localiza por debajo del hígado. Sirve para recolectar, almacenar y concentrar la bilis recibida del hígado, y expulsarla hacia el intestino delgado conforme se necesite para la emulsificación de grasas.

La pared de la vesícula biliar consta de una mucosa, una capa muscular y una serosa. La mucosa está formada por una capa de epitelio cilíndrico simple (con borde en cepillo). El epitelio es responsable de concentrar la bilis y de secretar un moco que protege la pared interna de la vesícula biliar. En un estado no distendido, la mucosa forma pliegues mucosos distintivos (rugosidades), entre los que se encuentran criptas mucosas con forma de bolsillos, o divertículos. La lámina propia de la mucosa, que se ubica subyacente al epitelio, está compuesta por tejido conectivo laxo.

La capa muscular está compuesta por una sola capa de músculo liso, cuyas fibras están orientadas aleatoriamente y que funciona para impulsar la bilis hacia el conducto colédoco. Externamente, la vesícula biliar está rodeada por una serosa, excepto en donde la vesícula biliar se une al hígado. Aquí, la serosa es reemplazada por una adventicia.

Aprende más acerca de la histología de la vesícula biliar explorando la siguiente unidad de estudio:

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Apéndice vermiforme

El apéndice vermiforme es una estructura apendicular con forma de tubo del ciego (intestino grueso), que se ubica en la porción inferior derecha del abdomen. Consta de la misma organización histológica en capas que todo el intestino, el cual está formado por una mucosa, una submucosa, una capa muscular y una serosa.

El apéndice vermiforme está cubierto por una sola capa de epitelio cilíndrico que contiene criptas intestinales profundas pero no vellosidades. El tejido linfático es especialmente prominente en la lámina propia y en la submucosa, con muchos ganglios linfáticos y centros germinativos grandes. Las criptas son particularmente profundas para que los ganglios entren en contacto cercano con el lumen intestinal. El epitelio de las criptas intestinales está ausente sobre los vértices de los ganglios linfáticos. Aquí, se reemplaza por células M (células con micropliegues) especializadas.

La capa muscular del apéndice vermiforme consiste en una capa muscular circular interna y una capa longitudinal externa. En contraste con el ciego y el colon, la capa muscular longitudinal del apéndice vermiforme es continua y no se divide en tenias. Debido a que el apéndice vermiforme usualmente se localiza intraperitonealmente, está rodeado por una serosa.

¿Te gustaría aprender más sobre el apéndice vermiforme y sus características histológicas? Explora la siguiente unidad de estudio:

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Kim Bengochea Kim Bengochea, Universidad Regis, Denver
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